Castillo de Javier, uno de los castillos con más historia de Navarra

El histórico Castillo de Javier se encuentra situado en el extremo este de la comunidad foral de Navarra a pocos km de la provincia de Zaragoza, junto a la localidad que lleva su nombre. El castillo de Javier es uno de los lugares más visitados de Navarra por ser la casa natal de su patrón San Francisco Javier, conocido por sus misiones alrededor mundo, además de ser el lugar dónde cada año se congrega miles de navarros en la popular peregrinación conocida como “Javierada”.

El castillo de Javier es todo un clásico entre las listas de los castillos más bonitos de España. Aunque, si bien es cierto que no hay que desmerecer su belleza, también es verdad que se ha querido explotar en exceso el lugar con numerosos comercios e infraestructuras lo que, desde nuestro punto de vista, ha hecho que pierda un poco el encanto medieval del castillo.

A pesar de ello, teníamos claro que tras visitar el Monasterio de Leyre, nuestra incursión a Navarra no podía pasar por alto este lugar. El castillo de Javier es una parada inexcusable para conocer un poco más de la historia de la comunidad foral.

castillo de javier

Castillo de Javier, Navarra

Historia del Castillo: San Francisco Javier

Los orígenes del castillo se remontan a finales del siglo X, cuando se levantó la torre cuyo funcionamiento era el de una atalaya y que posteriormente se convirtió en la torre del Homenaje. Su ubicación estratégica entre los reinos de Navarra y Aragón, hizo que rápidamente se ampliaran las defensas en torno a la torre. Fue en este lugar, dónde en 1506  nació en el seno de una familia noble Francisco de Javier quien posteriormente sería el cofundador de la Compañía de Jesús y uno de los misioneros españoles mas conocidos.

Su misión evangelizadora le llevó desde Navarra hasta Asia pasando por África. Toda una azaña para la época.

Hoy en día, su labor es venerada por el pueblo navarro en las tradicionales “Javieradas”, una perigrinación hacia el Castillo de Javier que se celebra los dos primeros fines de semana de marzo.

“El origen de esta tradición se remonta a 1886, cuando se invocó a San Francisco Javier para que hiciera remitir la epidemia de cólera que asolaba Navarra, y en agradecimiento al cumplimiento de este deseo, se llevó a cabo la promesa de acudir peregrinando a Javier.

Castillo de Javier

 

Visita al Castillo de Javier

El conjunto está constituido por la Basílica, el Castillo de Javier que alberga un museo en su interior, la Parroquia de la Anunciación en la que Francisco fue bautizado. Además, el complejo incluye otros edificios como el Centro de Espiritualidad, el Aula Francisco de Jasso y el archivo de Shurhammer. Nosotros visitamos el castillo, la basílica y la parroquia.

Tras cruzar la primera línea de murallas, accedemos al castillo por un puente levadizo y acto seguido encontraremos la taquilla para comprar las entradas al módico precio de 3€. Desde aquí, iniciaremos nuestra ruta por el interior del castillo. Como es lógico en un castillo de estas características no encontraremos grandes estancias y salas decoradas lujosamente pero hay que reconocer que la visita se hace entretenida y vale la pena.

El interior alberga un museo dividido en tres partes en las que descubriremos la historia del castillo, de San Francisco Javier y Navarra además de una escueta pero bella pinacoteca.

Tras visitar el museo, recorreremos algunas de las salas del castillo como la Sala de Escudos, donde se encuentran los blasones de la familia de Francisco Javier y el árbol genealógico o la Sala Principal. Desde aquí seguimos por la escalera de la Torre de Undués y el Camino de Ronda, la zona defensiva del castillo hasta alcanzar la parte más primitiva del edificio, la torre del homenaje. Merece la pena subir y disfrutar de las vistas de la sierra de Leyre. Descendemos de nuevo hasta la planta de la torre para dirigirnos a uno de los pequeños tesoros que guarda el castillo: la capilla del Santo Cristo. A través de una verja de hierro forjado encontramos al Cristo de Javier, tallado en el siglo XVI en nogal y rodeado de frescos medievales que representan la danza de la muerte.

Capilla de Santo Cristo, castillo de Javier

La visita finaliza en el patio de armas. Antes de marchar no podemos dejar de visitar Basílica construida a finales del siglo XIX junto al castillo, en cuya fachada se recogen motivos de la vida de Javier.

Finalmente, y para acabar esta interesante visita al conjunto monumental, merece la pena acercarse a la Parroquia de la Anunciación, lugar con un importante valor espiritual por ser donde Francisco Javier recibió el agua del Bautismo en la pila situada bajo el coro. La configuración actual del edificio se remonta al siglo XVII.

En general, la visita al castillo de Javier y demás edificios, es una visita imprescindible en Navarra no solo por su belleza sino también por el importante valor histórico y espiritual.

Información Práctica

– Horario de Visitas

  • Abierto todos los días (exceptuando el 24 de diciembre por la tarde, el 25 de diciembre y el 1 de enero y 6 de enero).
  • Del 1 de marzo al 30 de junio – 10h15 a 19h00
  • Del 1 de julio al 31 de agosto – 10h00 a 19h30
  • 1 de septiembre al 31 de octubre – 10h15 a 19h00
  • 1 de noviembre al 28 de febrero – 10h30 a 18h00
  • Semana Santa – 10h15 a 19h30
  • Parking gratuito en la entrada del recinto.

– Precios 

  • Adultos: 3€
  • Niños (6-12 años): 1,50 €

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2 Comments

    • Toni&Maura

      22 agosto, 2020 at 22:04

      ¡Gracias Sergio por las recomendaciones! En Olite estuvimos hace muchos años pero queremos volver y Pamplona no la conocemos, así que tomamos nota para la próxima escapada por España 🙂

      ¡Saludos!

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