Tras recorrer decenas de kilómetros por verdes viñedos desde Burdeos llegamos a la villa de Saint Emilion, situada sobre una colina frente al río Dordogne, con sus casas formando una especie de anfiteatro y lleno de calles estrechas y escarpadas. Saint Emilion es un bello pueblo de origen medieval y uno de los pocos pueblos que ha sido clasificado como Patrimonio de la humanidad por la UNESCO. Se encuentra situado en la región de Aquitania, entre Burdeos y la región de la Dordoña y es uno nuestros pueblos favoritos del sur de Francia.
Qué ver en Saint Emilion
A pesar de no ser un pueblo muy grande guarda en su interior un patrimonio excepcional. Llegamos con las expectativas muy altas y la verdad que no nos defraudó. Destaca en el centro del pueblo una ermita monolítica sobre la cual se erige un campanario de 68 metros torre que domina la villa medieval. Además, encontramos otros edificios de interés como el Château du Roi, la iglesia Colegialle, le Palais Cardinal, la Grande Muraille, el convento de los Cordeliers, las fosas y los viejos muros que rodean la villa.
A lo largo del pueblo encontraremos numerosos restaurantes, tiendas gastrónimicas y vinotecas dónde poder degustar el vino de la región.
Recomendamos la visita al pequeño Château du Roi. Desde este emblemático torreón del siglo XIII se pueden disfrutar de unas magníficas vistas de la villa así como de las campos de viñedos que inundan de verde los alrededores.
