Situada a unos 8 kilómetros al oeste de Córdoba, a los pies de Sierra Morena, Abderramán III, primer califa de Al-Andalus, mandó construir la Medina Azahara. Esta amplísima construcción llegó a albergar hasta 25.000 personas. Todos los organismos estatales del califato residían allí. Sus fastuosos salones y las riquezas de todo tipo que se encontraban en su interior la convirtieron en el escenario preferido para la recepción de las numerosas embajadas. Entre los restos que aun se distinguen cabe destacar el Salón Rico, la Casa de Yafar, el Baño, el gran pórtico, su mezquita,entre otros. Realmente es una visita muy interesante pues es de los pocas ciudades de este tipo que se conservan en el territorio peninsular.
Salón rico
Casa del Yafar
Gran Pórtico
Restos de la mezquita