Viajamos de nuevo al país germano con el objetivo de visitar Bremen, una ciudad situada al noroeste de Alemania que se extiende a orillas del río Weser. Bremen es la capital del estado federado homónimo, el más pequeño de los estados federados de Alemania, además de ostentar el título de Hansestadt, ciudad hanseática y libre, que solo comparte con la vecina Hamburgo. El estado de Bremen está compuesto en realidad por dos ciudades separadas: Bremen y Bremerhaven o puerto de Bremen, aunque nosotros solo visitamos la primera.
La mayor parte de los atractivos turísticos de Bremen se concentran en la ciudad antigua fácilmente identificable por estar delimitada por el antiguo perímetro amurallado, hoy convertido en un agradable parque paisajístico.
Tal vez, el casco histórico de Bremen no es uno de los mejor conservados de Alemania ya que fue en gran medida afectado por los bombardeos que tuvieron lugar durante la Segunda Guerra Mundial. A pesar de ello, Bremen mantiene un notable número de edificios y lugares de interés, incluyendo sitios declarados patrimonio mundial, que hacen que valga la pena dedicar una jornada o dos a descubrir esta antigua urbe hanseática con más de 1200 años de historia. Los más representativos son el Ayuntamiento de Bremen, la estatua de Rolando, la catedral o los famosos Músicos de Bremen.
En este artículo, te contamos con más detalle las principales cosas que ver y hacer en Bremen en un día.
Qué ver en Bremen en un día
1. Ayuntamiento de Bremen
Empezamos la visita a la ciudad de Bremen visitando la plaza del mercado, Markplatz, donde se encuentra el magnífico Ayuntamiento. Este edificio fue construido entre 1405 y 1410, si bien el balcón central del edificio se añadió entre 1595 y 1618. El Ayuntamiento de Bremen destaca por su fabulosa fachada de estilo tardo-renacentista siendo uno de los mejores ejemplos del denominado Renacimiento del Weser.
Vale la pena detenerse un tiempo a observar todos los detalles de la fachada y sus esculturas, pues se trata del principal atractivo turístico de la ciudad. Para visitar su interior podéis hacerlo contratando una visita guiada en la oficina de turismo. En el interior podrás visitar distintas salas como la Cámara Dorada, así como también su conocida bodega, llamada Ratskeller. A nosotros no nos coincidió el horario pero lo dejamos para la próxima.
Desde 2004, el Ayuntamiento de Bremen junto con la estatua de Rolando son Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
2. Estatua de Rolando
Frente al ayuntamiento se alza la imponente estatua de Rolando. Con sus más de 10 metros de altura es la más grande entre las de su estilo en Alemania. La estatua de Rolando, sobrino de Carlomagno, simboliza la independencia de la ciudad. La espada que sostiene entre sus manos es el símbolo de la justicia y representa la independencia judicial. En el escudo se puede ver una inscripción en la que se lee el edicto del emperador concediendo el fuero de ciudad a Bremen.
Según cuenta la leyenda mientras esta estatua siga en pie Bremen seguirá siendo libre e independiente.
Si queréis descubrir esta y muchas más curiosidades, una buena opción es realizar un free tour por el centro de Bremen.
3. Los músicos de Bremen
En el lado oeste del Ayuntamiento se halla la famosa representación de las figuras del cuento de los Hermanos Grimm Die Bremer Stadtmusikanten (Los Músicos de Bremen). La estatua representa a los protagonistas del cuento un gallo, un gato, un perro y un burro, los cuales según el relato viajaron hasta esta ciudad para hacer dinero como músicos. Esta escultura de bronce es obra del artista Gerhard Marcks y data del año 1951. Veremos que el hocico y las patas delanteras del burro están desgastadas porque todo el que viene a la ciudad tiene que tocarlas y pedir un deseo, ya que dan suerte.
En la foto parece que estamos solos pero se junta bastante gente alrededor de la escultura esperando a sacarse una foto y, como no, pedir su deseo.
4. Catedral de San Pedro
También en la plaza de Mercado encontramos la catedral de Bremen, St. Petri Dom o Catedral de San Pedro, un templo de origen románico con más de 1200 años de historia. No obstante, la arquitectura actual de la catedral que vemos hoy en día es de estilo gótico temprano y data de la primera mitad del siglo XIII. Llama la atención sus dos torres gemelas de unos 100 metros de altura.
Cabe destacar que la catedral, así como el edificio del Ayuntamiento y la estación central, se salvaron de los bombardeos que destruyeron parte de la ciudad durante la Segunda Guerra Mundial.
El acceso al interior de la catedral es gratuito y su horario es de 10h a 17h. También es posible subir a una de sus torres para contemplar desde lo alto las vistas de la ciudad y de la plaza del Mercado. La entrada para subir a la torre cuesta 5€.
En la zona del claustro de la catedral hay una escultura dedicada al Apóstol Santiago, por lo que Bremen es otra de las ciudades que son parte del Camino de Santiago.
5. Haus Schütting
En el lado suroeste de la Markplatz se erige la Haus Schütting, un notable edificio de estilo manierista holandés construido entre 1537 y 1539. Este palacete acogía las reuniones del gremio de mercaderes de Bremen. Desde 1848 es la sede de la Camara de Comercio de Bremen.
En la fachada principal destaca es el escudo de armas y el lema de los comerciantes «Buten un binnen, dare un winn» que podría traducirse como «Afuera y adentro, atrévete a ganar».
6. Iglesia Unser Lieben Frauen
La iglesia Unser Lieben Frauen, o iglesia de Nuestra Señora, cierra por el noroeste el conjunto monumental de la Markplatz. Tras la catedral, es la segunda iglesia más antigua de Bremen. Fue construida en el siglo XIII aunque sufrió importantes daños durante la Segunda Guerra Mundial, incluida la destrucción de la torre del campanario. Tras la restauración realizada en la segunda mitad del siglo XX, el templo ha recuperado en gran medida su imagen original.
7. La Böttcherstrasse
La Böttcherstrasse es uno de los rincones más famosos de Bremen. Se trata de una pequeña calle que podemos atravesar para ir de la Markplatz hasta la orilla del río Weser. Fue construida en 1931 en estilo art déco por el comerciante de café Ludwig Roselius.
La entrada a la calle está presidida por un bajo relieve dorado «Der Lichtbringer» que representa al arcángel Miguel luchando contra un dragón. Entre las visitas de interés en la Böttcherstrasse podemos citar el museo Paula-Modersohn-Becker, la Casa Roselius o la propia oficina de turismo de Bremen. Sobre el edificio de la oficina de turismo, conocido como Haus des Glockenspiels, destacan un conjunto de 30 campanas fabricados con la prestigiosa porcelana de Meissen. Las campanas suenan cada hora entre las 12 y las 18.
8. Pasear a orillas del Weser
La orilla del río Weser es uno de los lugares más agradables para dar un paseo en Bremen, especialmente en verano, cuando encontramos varias terrazas con vistas al río.
Si caminamos por la orilla opuesta al casco histórico, podremos disfrutar de una de las mejores vistas panorámicas de Bremen con las puntiagudas torres que sobresalen en el horizonte.
En la primera línea destaca la iglesia evangelista de San Martín. No obstante, la mayor parte de las miradas se concentran en un navío de grandes dimensiones bautizado como Alexander von Humboldt y que desde 2014 se encuentra permanente amarrado en esta parte del río. Se trata de un velero de tres mástiles construido en 1906 que se utilizó durante muchos años como buque faro y también como buque escuela. Actualmente, es un hotel y restaurante.
9. El barrio de Schnoor
Siguiendo la orilla del Weser hacia el sur llegaremos al barrio más antiguo y pintoresco de Bremen, el Schnoorviertel o barrio de Schnoor. Este barrio está formado por un bello conjunto de pequeñas y estrechas casas con fachadas entramadas de datan del siglo XV y XVI. Milagrosamente esta barriada sobrevivió a los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial y hoy en día nos podemos hacer una idea como debía lucir la ciudad de Bremen.
Schnoorviertel es un lugar ideal para perderse mientras visitamos sus pequeñas tiendas, cafeterías y restaurantes. Entre las visitas de interés se encuentra la iglesia Johanniskirche o el Museo del Juguete (Spielzeugmuseum).
10. Calle de los Cerdos
Continuamos el recorrido por Bremen. Cruzamos de nuevo el casco histórico de camino al parque que rodea la ciudad y salimos por la calle de los cerdos, oficialmente Sögestrasse, una calle comercial situada en el casco antiguo de Bremen que debe su fama a una estatua de un pastor con sus cerdos conocida como Hirt mit Schweinen. Es una de las obras más representativas del escultor Peter Lehman y data de 1974.
Es un estatua querida por los locales aunque realmente no le vimos nada de especial.
11. Molino de Bremen
Llegamos al cinturón verde que rodea el casco histórico de Bremen. Se trata del parque Wallanlagen un agradable espacio verde que ocupa el espacio de las antiguas murallas de la ciudad. El lugar más interesante que ver en el parque es un llamativo molino de viento construido a principios del siglo XX. Es el único que se conserva de los seis que había originalmente sobre las murallas de Bremen. Este molino se conoce como Ansgaritorsmühle o Herdentorsmühle.
Lo cierto que el parque junto con el molino es uno de los rincones que más nos gustaron. Cabe decir que es habitual que el prado junto al molino se llene con flores lo que lo convierte en un rincón especialmente bonito para sacar fotos.
Bajo el molino hay actualmente una cafetería ideal para tomar algo con vistas al parque.
12. Hauptbanhof de Bremen
Más allá del antiguo perímetro amurallado, recomendamos la visita a dos lugares. El primero de ellos es la estación central de Bremen o Hauptbanhof. Fue construida a finales del siglo XIX en estilo neorrenacentista y está considerada como una de las estaciones más bellas de Alemania.
Como todas las estaciones, encontraréis un buen número de puestos de comida rápida que os pueden sacar de un apuro. Nosotros nos hicimos con una típicas Bratwurst para comer algo mientras íbamos a la siguiente parada.
13. Bürgerpark
La segunda visita imprescindible fuera del casco antiguo de Bremen es el Bürgerpark. Bremen fue uno de los epicentros del movimiento de los «Verdes» en Alemania y el Bürgerpark es el pulmón verde de la urbe alemana. Se trata de un gigantesco parque fundado en la segunda mitad del siglo XIX con más de 200 hectáreas que incluyen bosques, praderas, lagos artificiales, parques infantiles, etc.. Es un lugar ideal para dar largos paseos, la práctica de deporte o simplemente desconectar de la ciudad durante nuestra visita.
Otras cosas que hacer en Bremen
Visitar los museos de Bremen
Si se disponen de más días en Bremen, una buena opción para completar la visita es conocer alguno de sus museos. A continuación, os dejamos con los más interesantes:
Kunsthalle. Aunque la colección original fue requisada por Rusia tras la Segunda Guerra Mundial, el Kunshalle guarda una interesante pinacoteca con obras que abarcan desde maestros como Durero, Van Dyck o Rubens, hasta obras de artistas franceses y alemanes de los siglos XIX y XII.
Übersee Museum. La exposición permanente del Museo de Ultramar (Übersee Museum), como indica su propio nombre, nos transportará de viaje por Oceanía, Asía, América y África para aprender sobre la evolución natural y cultural de estos continentes. Puede ser una opción interesante para aquellos que viajen con niños.
Probar la cerveza Beck’s
En Bremen se produce una de las cervezas más internacionales de Alemania: Beck’s. Uno de los mejores sitios para probar la cerveza local es la cervecería Spitzen Gebel ubicada en un edificio histórico del centro de Bremen.
Es una cerveza rubia y ligera, ideal para la época estival, aunque personalmente nos gustan más otras cervezas alemanas con más cuerpo.
Ratskeller de Bremen
Aunque la cerveza de Bremen es mundialmente famosa, lo cierto es que la ciudad tiene una larga tradición de comercio con el vino que se remonta a la época en la que Bremen formaba parte de la liga Hanseática, una federación de ciudades hermanadas por el comercio.
La principal bodega de la ciudad, Ratskeller de Bremen, fue fundada en 1405 y continúa en funcionamiento hasta la fecha. Cuenta con la mayor colección de vinos alemanes del mundo que se pueden degustar en el restaurante junto con especialidades gastronómicas de Bremen. El precio por una copa de vino empieza a partir de los 5€.
También podéis conocer la bodegas con una visita guiada que incluye dos copas de vino. Los precios rondan los 20€ por persona.
Hasta aquí llegamos con nuestras recomendaciones para un viaje a Bremen. Si te ha gustado este artículo, tal vez interesen estas otras ciudades de Alemania:
¿Cómo llegar a Bremen?
Una de las cosas que más nos gustaron de visitar esta ciudad es que el aeropuerto es bastante pequeño y además está a tan solo 11 minutos del centro en tranvía.
Frente a la entrada del aeropuerto se encuentra la parada del tranvía. La línea que hay que coger es la número 6 que te deja en el centro de la ciudad o también en la estación de tren. Los tickets los puedes comprar en las máquinas que hay en la parada del tranvía o también dentro del mismo tranvía. El precio es de 2,8€ el trayecto.
Bremen se encuentra a tan solo una hora de distancia de Hamburgo, así que puedes aprovechar también para visitar esa ciudad.
Por último, os dejamos con algunos enlaces prácticos para preparar la visita:
Página oficial de turismo de Bremen.
Alojamiento en Bremen.
Actividades y visitas guiadas en Bremen.