Que ver en la comarca de Tarazona y el Moncayo

Qué ver en la comarca de Tarazona y el Moncayo en un día

En el artículo de hoy viajamos hasta tierras aragonesas. Concretamente nos situamos en el margen occidental de la provincia de Zaragoza con el objetivo de descubrir en una jornada los encantos de la Comarca de Tarazona y el Moncayo.

Para ello, proponemos una ruta variada que nos llevará desde el arte mudéjar de Tarazona hasta la majestuosidad del monasterio cisterciense de Veruela, pasando por los verdes hayedos que pueblan las faldas del Moncayo.

¿Qué ver en la comarca de Tarazona y el Moncayo?

Tarazona

La primera parada del día la dedicamos a conocer la capital de la comarca: Tarazona.

Cuenta la leyenda que Tarazona fue edificada por Túbalcaín y reedificada por Hércules, tal y como nos recuerda la monumental fachada de la Casa Consistorial. Lo que sí es empírico es que la población turiasonense tiene más de dos mil años de historia y alberga un conjunto monumental digno de visita.

Qué ver en Tarazona

Catedral de Tarazona

El monumento más renombrado de Tarazona es, sin lugar a dudas, la Catedral de Santa María de Huerta. Este magnífico templo religioso remonta sus orígenes al siglo XII y en su construcción se han ido incorporando diferentes estilos arquitectónicos como el gótico, mudéjar, renacentista y barroco. La arquitectura mudéjar es una las notas singulares ya que es una de las pocas catedrales de España que conserva elementos de este esitlo arquitectónico (junto con la Catedral de Teruel). La torre o el claustro son algunos de los elementos que incorporan este estilo.

Otro elemento que hace única a la catedral de Tarazona son las pinturas denominadas grisallas que decoran el cimborrio. Estas escenas descubiertas durante la última restauración muestran personajes biblícos y mitológicos desnudos, algo extremadamente inusual en una catedral cristiana. Para contemplar esto último se debe realizar la visita guiada denominada «Kiborion«. El precio son 3€, mientras que la entrada al templo y al claustro son 1,50€.

Catedral de Tarazona

Al salir de la catedral, podemos hacer un breve desvío por la calle Francisco Martinez Soria para ver la estatua del famoso y entrañable actor español orihundo de Tarazona.

Plaza de Toros Vieja

Seguimos nuestro itinerario por la Plaza de Toros Vieja, otro de los edificios singulares que ver en Tarazona. Fue construida por iniciativa particular a finales del siglo XVIII y está conformada por 32 casas dispuestas alrededor de un espacio de central de planta octogonal. Los vecinos contemplaban los espectáculos taurinos desde los balcones que daban a la plaza. Hasta 1870 fue la única plaza de toros de Tarazona.

Plaza de Toros Vieja, Tarazona

Ayuntamiento de Tarazona

Continuamos el paseo en la otra orilla del río Queiles para acceder al núcleo antiguo de Tarazona conocido como El Cinto. Esta barriada estaba ubicada dentro del recinto amurallado, de ahí su nombre.

Nos dirigimos primero hacia la Plaza de España para admirar la bella fachada renancentista del Ayuntamiento o Casa Consistorial. Este monumental edificio, cuyos orígenes se remontan al siglo XVI, se levantó sobre las paredes de la antigua muralla.

Llama la atención la galería superior realizada durante la segunda mitad del siglo XX y que imita la galería alta del claustro del Monasterio de Veruela. Destaca, asimismo, el friso en relieve que relata la entrada triunfal del papa Clemente VII y Carlos V en Bolonia en 1530 para ser este coronado como Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico. Bajo la galería encontramos los escudos imperial, aragonés y turiasonense, así como personajes mitológicos relacionados con la fundación de la ciudad.

Ayuntamiento de Tarazona

En esta misma plaza, un cartel nos recuerda la tradición festiva de El Cipotegato, declarada Fiesta de Interés Turístico  Nacional. El Cipotegato es un personaje popular con varios siglos de historia cuya imagen nos recuerda a la de un bufón y que va vestido con un colorido traje arlequinado, portando una vara roja para su defensa y una máscara que oculta su identidad.

Cada año, el 27 de agosto a las 12 horas, tiene lugar la salida del Cipotegato desde el ayuntamiento de Tarazona. El individuo se escabuye entre la multitiud para realizar un itinerario secreto por la ciudad y regresar finalmente a la plaza del Ayuntamiento. Mientras tanto el pueblo le lanza tomates.

Judería y Casas Colgadas

A continuación, nos adentramos por las callejuelas del casco antiguo para perdernos por su antigua judería medieval, incluida en la Red de Juderías de España. La judería se extiende por las calles de los Aires, Judería, Rúa Alta, Rúa Baja y la plaza de los Arcedianos. También llaman la atención un conjunto de casas colgadas situadas en la parte posterior de la calle del Conde. No son equiparables a las de Cuenca pero vale la pena verlas.

Judería de Tarazona

Iglesia de Santa María Magdalena

Sin salir del barrio de El Cinto, nos acercamos a la iglesia de Santa María Magdalena, cerca del Palacio Episcopal. Hasta la construcción de la catedral, fue el principal templo de Tarazona. Destaca por su esbelta torre mudéjar visible desde distintos puntos de la ciudad.

Mudéjar en Tarazona

Bajo la iglesia se abre un mirador con una bella panorámica sobre la parte baja de Tarazona con el Plaza de Toros Vieja y la Catedral como protagonistas.

Tarazona

Palacio Episcopal

El recorrido monumental por Tarazona nos lleva inevitablemente al Palacio Episcopal. Este edificio de estilo renacentista fue antaño fortaleza musulmana y también residencia de los reyes de Aragón tras la reconquista. No tuvimos ocasión de visitarlo por dentro ya los horarios son algo reducidos, pero si tenéis la oportunidad vale la pena ver la galería de retratos episcopales.

Palacio Episcopal

Finalizamos el recorrido por Tarazona en la Plaza Laguna desde donde son visibles un lienzo de la antigua muralla y dos torreones. Por el camino podemos ver otros lugares de interés como la iglesia de San Atilano, dando así por acabada la visita a Tarazona.

Para más información turística sobre Tarazona, así como información sobre horarios y precios actualizados, os recomendamos visitar su página web oficial.

Parque Natural del Moncayo

Tras una visita cultural damos paso a la naturaleza. Continuamos hacia el Parque Natural del Moncayo coronado por la cima homónima que, con sus 2314m, constituye el pico más alto de la provincia.

Desde Tarazona pasaremos por algunas pequeñas poblaciones hasta alcanzar los frondosos bosques que contrastan con la aridez del entorno turiasonense. Si se dispone de poco tiempo, es recomendable realizar el ascenso en coche hacia el Santuario de la Virgen del Moncayo. De camino se pueden realizar varias paradas en las distintas fuentes (Fuente de Peñarroya, Fuente de Teja, Fuente los Frailes) y realizar un receso bajo el paraguas verde con el remor del agua de fondo. Desde estos puntos parten excursiones que recorren los hayedos del parque. La más popular es la ruta circular del hayedo de Fuenterroya de unas 2h y 30 de duración.

Con el coche podremos llegar prácticamente a 1600m de altura para disfrutar de una impresionante vista panorámica. Desde este punto parten las excursiones que conducen hasta la cima del Moncayo. Además, podremos acercarnos hasta el Santuario del Moncayo (hoy restaurante) en un paseo de unos 15 minutos a pie. Para acceder al santuario en coche es necesario reserva previa en el restaurante.

La última parada que proponemos en este entorno natural es el Embalse del río Pedregal. Este fue uno de los lugares que más nos gustó. Se puede rodear el embalse mientras se disfruta de una imagen de postal del Moncayo. Nos pareció un lugar ideal para disfrutar de este hermoso paisaje con tranquilidad.

Trasmoz

Nos alejamos del Parque Natural rumbo a la localidad de Trasmoz, la única población española que ha sido excumulgada. El motivo fue una disputa en el siglo XIII con el vecino monasterio de Veruela por el aprovechamiento del agua. Situación que se mantiene hasta la fecha pues ninguna autoridad eclesiástica lo ha revertido.

Esta historia inspiró posiblemente a Gustavo Adolfo Bécquer quién durante su estancia en el monasterio de Veruela escribió sobre esta localidad maña en su obra «Cartas desde mi celda«, concretamente en las cartas Séptima y Octava donde cuenta la leyenda del Castillo de Trasmoz y el origen de la brujería en Trasmoz.

Todo ello ha contribuido a la leyenda y fama de este pueblo cuyo principal atractivo monumental es la fortaleza del siglo XII que domina la localidad.

Castillo de Trasmoz

Monasterio de Santa María de Veruela

La guinda a esta ruta la pone el monasterio de Santa María de Veruela. Se trata de un fabuloso complejo monástico que perteneció a la orden del Cister. Esta comunidad monástica ya nos tiene acostumbrados a edificios de gran belleza (véase el monasterio de Santes Creus o el de Poblet, ambos en Tarragona) y el de Veruela no se queda corto. Se levanta en la cercanía del macizo de Moncayo, rodeado por murallas y una imponente torre que custodia la entrada.

El monasterio cisterciense nos recibe con más de 8 siglos de historia si bien su actividad litúrgica se mantuvo solo hasta la desamortización de Mendizábal en la primera mitad del siglo XIX. Tras su abandono, las ruinas de este gran monasterio se convirtieron en un lugar de inspiración romántica y que atrajo artistas como Gustavo Adolfo Bécquer quien se inspiraría desde aquí para escribir las «Cartas desde mi celda».

En la actualidad el monasterio está bien cuidado y se puede visitar la iglesia, el claustro, diferentes estancias del monasterio, una exposición dedicada a Gustavo Adolfo Bécquer, así como un museo dedicado al vino.

Una visita muy completa e imprescindible si estás en la zona.

La entrada al conjunto cuesta 1,80€.

Con la visita al Monasterio de Veruela finaliza nuestra jornada recorriendo la comarca de Tarazona y el Moncayo. Un lugar que recomendamos marcar en el mapa y que consideramos ideal para una escapada de fin de semana que combine naturaleza y actividades culturales.

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