Trujillo es una hermosa y tranquila ciudad medieval situada en la provincia de Cáceres, en la comunidad autónoma de Extremadura. Trujillo ha recorrido todas las etapas de la historia, desde poblado romano a ciudad medieval, lo que le ha servido para obtener los títulos de Ciudad Muy Noble, Muy Leal, Insigne y Muy Heroica. De 1528 a 1804 fue la única capital provincial de Extremadura, al ser la provincia de Trujillo la única provincia de la actual región.
La villa ha sido cuna de grandes descubridores como Francisco Pizarro, conquistador del Perú, cuya escultura ecuestre se levanta en la Plaza Mayor, o Francisco de Orellana, descubridor del río Amazonas, entre otros.
Qué ver en Trujillo
Lo primero que nos llama la atención al llegar a Trujillo es su espectacular plaza. La Plaza Mayor de Trujillo, de forma rectangular y de estilo renacentista es el lugar más conocido de Trujillo. En sus orígenes esta plaza era ocupada por arrabales, artesanos y comerciantes. Posteriormente, en ella se construyeron palacios y casas señoriales que convirtieron a esta plaza en el lugar central de la vida en la ciudad a partir del siglo XVI.
En la plaza destaca una majestuosa estatua ecuestre de Francisco Pizarro, obra del escultor estadounidense Charles Cary Rumsey. La estatua se instaló a principios del siglo XX.
El edificio más llamativo de la plaza mayor es el palacio de la Conquista o palacio de los marqueses de la Conquista, morada de los familiares de Francisco Pizarro. Este espectacular palacio renacentista fue construido en el siglo XVI por orden de Hernando Pizarro y por su esposa y sobrina Francisca Pizarro Yupanqui, siguiendo el deseo expreso de su padre Francisco Pizarro. Lo que más llama la atención del edificio es un balcón custodiado por un enorme escudo decorado con las armas de Carlos V, referencias a la conquista del Perú y el escudo de armas de la familia Pizarro.
Tras recorrer la magnífica plaza mayor podemos iniciar un pequeño ascenso para acceder al recinto amurallado por una de sus puertas. En su interior alberga un precioso y monumental casco histórico, un verdadero museo al aire libre y que seguro no os dejará indiferentes.
En primer lugar, nos encontramos con el castillo de Trujillo, fortaleza construida en su mayor parte durante el dominio musulmán entre los siglos IX y X. Se sitúa en lo alto de un cerro dominando la población. Recientemente ha sido elegido por los productores de Juego de Tronos para ser uno de los escenarios de la serie.
Dentro del recinto histórico, además de pasear por sus tranquilas calles empedradas, es posible visitar distintas iglesias y algún pequeño museo que hace que la visita sea más enriquecedora. Una de las visitas que más nos llamó la atención fue la Casa-Museo de Pizarro, que si bien no destaca arquitectónicamente entre toda la belleza de Trujillo, podemos disfrutar de una interesante exposición de los viajes y campañas de Pizarro por las Américas lo que nos permitirá entender un poco mejor la historia de la ciudad.
Paseando por sus calles empedradas llegamos a uno de es espacios más originales del centro histórico de Trujillo: la Alberca. Este pozo de origen romano de más de 14 metros de profundidad excavado sobre la roca viva en el centro de la villa llama notablemente la atención.
El centro histórico de Trujillo es una sucesión de monumentos en un lugar perfectamente conservado y manteniendo el encanto propio de los pueblos medievales. Entre estos lugares con encanto destaca el Palacio de Juan Pizarro de Orellana, explorador del Perú. Este edificio fue construido por Juan Pizarro de Orellana cuando regresó de América en el siglo XVI sobre un antiguo edificio militar propiedad de don Diego de Vargas. De estilo renacentista, el elemento más llamativo es el balcón que conecta las dos torres y una galería cuyo sostenida por elegantes columnas que descansan sobre la balaustrada. En la balautrada podemos observar el escudo de los Orellana y el de los Pizarro.
También podremos recorrer parte de sus murallas y disfrutar de vistas panorámicas sobre la villa.
En Trujillo, asimismo, se celebran dos fiestas de interés turístico regional, el Chíviri y la Semana Santa Trujillana, y otros eventos como la Feria Nacional del Queso y la Feria Agroganadera.
Si aun te faltaban motivos para visitar Trujillo, esperamos haberte dado razones suficientes para ir a una de las poblaciones más bonitas de España. Si quieres seguir descubriendo lugares con encanto de España, tal vez te interese:
Información Práctica de Trujillo
– ¿Cómo llegar?
- La mejor opción es llegar en coche: Madrid, Autovía del Suroeste A-5; Gijón, Autovía Ruta de la Plata A-66 (Gijón-Zamora-Salamanca-Cáceres (enlaza la A-58 a Trujillo); Mérida Autovía A-5 Cáceres, Autovía Trujillo-Cáceres A-58; Sevilla, Autovía A-66
– Alojamiento
- Hoteles en Trujillo y alrededores
– Visita
- Página oficial de turismo en Trujillo
