Oporto en tres días ¿Qué ver y hacer en Oporto?

Oporto es la segunda ciudad más grande de Portugal y está situada a orillas del río Duero. Es un destino interesante que combina riqueza histórica, una bella arquitectura y una importante tradición vinícola. Oporto es una ciudad que se descubre a pie, cruzando sus puentes, admirando su arquitectura de azulejos y disfrutando de su atmósfera acogedora. En tres días, se puede obtener una visión bastante completa de lo que hace a Oporto un destino inolvidable: su rica historia, sus tradiciones culinarias y su vibrante vida urbana.

Con esta ruta, te proponemos sumergirte en el corazón de Oporto, descubriendo sus secretos mejor guardados y disfrutando con las vistas, sabores, y sonidos de esta ciudad portuaria. Desde el histórico barrio de la Ribeira hasta la mágica librería Lello, pasando por la imponente Torre de los Clérigos, la majestuosa Catedral de Oporto o el icónico Puente de Don Luis I. Este recorrido os encantará.

¿Qué ver en Oporto en tres días? Día 1

El primer día puede dedicarse a explorar el centro histórico, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, donde se encuentran la Torre de los Clérigos, a Librería Lello o la Sé de Oporto. No menos importante es la visita al Palacio de la Bolsa, con su exquisito Salón Árabe, que refleja la riqueza comercial de la ciudad en el siglo XIX.

1. Plaza Liberdade

Nuestro recorrido por Oporto arranca en la Plaza de la Libertad (Plaza Liberdade), una amplia y acogedora área en el corazón de la ciudad. Este lugar, punto de encuentro entre el pasado y el presente de Oporto, alberga el imponente edificio de la Cámara Municipal de Oporto, un bonito ejemplo de arquitectura neoclásica del siglo XX.

La plaza está flanqueada por otros edificios de gran importancia, cada uno mostrando distintos estilos arquitectónicos que van desde el neoclásico hasta el modernismo. Entre estos, destaca por su belleza el Palacio das Cardosas, que data del siglo XVIII.

La Plaza de la Libertad es más que un punto de referencia; es el lugar perfecto para comenzar a explorar la ciudad. Ofrece una mezcla vibrante de historia, arquitectura, y vida cotidiana, ideal para quienes buscan sumergirse en la atmósfera única de Oporto. Aquí, puedes tomar un momento para admirar la arquitectura, disfrutar de un café al aire libre, o simplemente observar el ir y venir de la ciudad.

Plaza de la Libertad, OportoPlaza de la Libertad, Oporto

2. Iglesia y Torre de los Clérigos

Tras dejar atrás la Plaza de la Libertad, nuestra ruta nos lleva por la Rua das Carmelitas, donde de pronto, se alza imponente ante nosotros la Iglesia y Torre de los Clérigos, un verdadero emblema de la ciudad de Oporto. Diseñadas por el arquitecto italiano Nicolau Nasoni en el siglo XVIII, esta iglesia barroca y su torre constituyen uno de los conjuntos arquitectónicos más notables de Portugal.

Torre de los Clerigos, Opoto

La Torre de los Clérigos, con sus 75 metros de altura, desafía el cielo de Oporto y nos invita a ascender por sus 200 escalones para descubrir una de las vistas panorámicas más espectaculares de la ciudad. Aunque el acceso a la iglesia es gratuito, subir a la torre tiene un costo de 5 euros.

Recomiendo encarecidamente llegar temprano para evitar las multitudes y disfrutar de la tranquilidad mientras se contemplan las vistas. Desde su cima, casi toda la ciudad se extiende a nuestros pies, aunque el famoso Puente de Don Luis queda oculto tras el Palacio Episcopal. Más allá de las vistas, ascender a la Torre de los Clérigos ofrece una excelente oportunidad para orientarse en la intrincada geografía de Oporto, una ciudad de pronunciadas subidas y bajadas, así como de laberínticas callejuelas que pueden desorientar al visitante más experimentado. Sin embargo, en la era del GPS, este desafío se convierte en parte del encanto de explorar Oporto.

3. Plaza de la Universidad y Fuente de los Leones

Después de disfrutar con las vistas desde la Torre de los Clérigos, nuestro paseo nos lleva hasta la Plaza de la Universidad, un espacio que alberga el histórico edificio de la Universidad de Oporto. En el corazón de la plaza, la Fuente de los Leones capta nuestra atención de inmediato. Esta fuente de bronce, adornada con cuatro majestuosos leones alados, fue construida en Francia alrededor de 1887 por la Compagnie Generale des Eaux pour l’Etranger. Esta fuente es una de las más hermosas de todo Oporto.

4. Iglesia do Carmo e iglesia de los Carmelitas

A escasos metros de la fuente, no os podéis perder la Iglesia do Carmo, un bello templo que se encuentra adosado a la Iglesia de los Carmelitas. Construida en el periodo entre 1756 y 1762, la Iglesia do Carmo es un espléndido ejemplo del estilo rococó. Su fachada principal cautiva a los visitantes con su diseño intrincado, aunque lo que verdaderamente llama la atención es el lateral de la iglesia, completamente revestido de azulejos, una característica distintiva del patrimonio portugués que le otorga un encanto especial y una belleza inigualable. Este mosaico de azulejos, obra de Silvestre Silvestri en 1912, narra visualmente la leyenda de la fundación de la orden de los carmelitas. En el interior, destacan los retablos dorados rococó del siglo XVIII, creados por Francisco Pereira Campanha.

5. Librería Lello e Irmao

Durante mi estancia en Oporto, no pude resistir la tentación de visitar la famosa Librería Lello e Irmao, conocida mundialmente por su extraordinaria arquitectura y su conexión con la saga de Harry Potter. El interior de la librería es, sin lugar a dudas, impresionante, con sus estanterías de madera tallada y su llamativa escalera de caracol.

Aunque es innegable la belleza y el encanto de esta librería, la experiencia se ve afectada por la masificación. El tiempo de espera fue de una hora, además, disfrutar de los bonitos detalles del interior se hace complicado en medio de la multitudEl mejor consejo que podría ofrecer es intentar llegar a primera hora de la mañana para esquivar las aglomeraciones.Sin embargo, mi visita estuvo marcada por sentimientos encontrados.

Es importante saber que para entrar a la Librería Lello e Irmao, se deben adquierir previamente los tickets en una tienda en la esquina de la Rua das Carmelitas, donde también se debe dejar cualquier mochila en consigna. Actualmente, el coste de entrada es de 8 euros, que se descuentan de cualquier compra. No obstante, prepárate, ya que los precios dentro pueden ser bastante elevados.

En resumen, la librería es muy bonita pero es importante ir mentalizado para la experiencia, tanto en términos de expectativas como de planificación.

6. Mirador da Victoria

El Mirador de la Victoria, muy cerca del monasterio homónimo, es un punto clave para disfrutar de vistas panorámicas en el centro de Oporto.  Concretamente, está ubicado en la Rua de São Bento da Vitória, 11. Desde este punto, podrás disfrutar de increíbles vistas sobre la ciudad y el río Duero, ofreciendo una perspectiva amplia y única. Su ubicación central lo hace fácilmente accesible y un lugar perfecto para una parada rápida, especialmente si buscas capturar Oporto con tu cámara. A pesar de ser un mirador muy bonito, incomprensiblemente el lugar está abandonado con un aspecto deplorable. 

Si quieres descubrir las mejores de vistas de Oporto, no te pierdas nuestra artículos sobre los miradores más bonitos de Oporto.

7. Estación de Sao Bento

Desde el mirador, nos acercamos a la emblemática calle comercial Rua das Flores rumbo a nuestra siguiente parada, la Estación de Sao Bento. La Estación de São Bento en Oporto no es solo un punto de partida para los viajes en tren desde la ciudad lusa; es una obra de arte en sí misma. Inaugurada en 1916 en el sitio de un antiguo convento, la estación es famosa por sus impresionantes paneles de azulejos en el vestíbulo, que representan escenas de la historia portuguesa, la vida cotidiana y el transporte. Creados por el artista Jorge Colaço a principios del siglo XX, estos 20,000 azulejos azules y blancos hacen de la estación un verdadero museo (gratuito). Para disfrutar con tranquilidad, es aconsejable visitar la estación durante las horas menos concurridas.

8. Catedral o Sé de Porto

La Catedral de Oporto, también conocida como Sé do Porto, es uno de los monumentos más antiguos y emblemáticos de la ciudad. De estilo predominantemente románico, la catedral comenzó a construirse en el siglo XII, aunque a lo largo de los siglos ha sido objeto de numerosas renovaciones y adiciones, lo que ha resultado en una mezcla fascinante de estilos arquitectónicos, incluyendo el gótico y el barroco. La fachada de la catedral, con sus torres cónicas y el rosetón central, ofrece una imagen imponente que domina el paisaje urbano de Oporto.

Sé de Oporto

Al ingresar a la Sé, los visitantes se encuentran con un interior austero pero majestuoso, acorde con el estilo románico. Destacan especialmente su nave central, el altar mayor y el claustro, este último famoso por los azulejos que narran diferentes pasajes bíblicos, un ejemplo magnífico del arte azulejar portugués del siglo XVIII.

La visita a la Catedral de Oporto no estaría completa sin disfrutar de las vistas panorámicas de la ciudad y el río Duero desde su terraza, accesible desde el claustro.

Cerca de la catedral, se encuentra la estatua ecuestre de Vímara Peres, considerado el Cid portugués, una figura histórica relevante en la reconquista de esta zona durante el siglo IX. Frente a la catedral, destaca el Pelourinho, un imponente columnata corintia que simboliza la autoridad municipal antigua. También es notable el Palacio Episcopal completa el conjunto arquitectónico.

9. Mirador e iglesia dos Grilos

A escasos metros de la catedral se encuentra la Igreja dos Grilos, también conocida como la Iglesia de San Lorenzo de los Grillos. Este templo jesuita, iniciado en el siglo XVI gracias a las donaciones de familias adineradas de la ciudad, refleja una historia rica y compleja, marcada por la expulsión de los jesuitas en el siglo XVIII y la posterior administración de la iglesia por la Universidad de Coimbra.

Su arquitectura manierista, complementada con elementos de otros estilos como el barroco y el neoclásico, muestra la evolución estilística a lo largo de las décadas de construcción. La fachada, con similitudes a la de la Universidad de Coimbra y coronada por una Cruz de Malta, junto con el interior que alberga tumbas de benefactores y altares dedicados, como el de Nuestra Señora de la Purificación, hacen de la Igreja dos Grilos un lugar de especial interés tanto histórico como arquitectónico. La iglesia alberga también un Museo de Arte Sacro y Arqueología.

10. Palacio de la Bolsa

El Palacio de la Bolsa, ubicado en la histórica plaza de Infante D. Henrique, es una joya arquitectónica del siglo XIX que originalmente servía como la bolsa de valores de la ciudad. Este edificio neoclásico es un testimonio de la riqueza y el esplendor de una época en la que Oporto se consolidó como un centro económico vital en Portugal.

El interior del palacio se puede visitar a través de un recorrido guiado. Alberga varios salones y espacios decorado, siendo el Salón Árabe el más impresionante de todos. Inspirado en el estilo morisco, este salón deslumbra con su decoración intrincada y dorada que evoca las lujosas cortes de Al-Andalus. Además del Salón Árabe, el palacio cuenta con otras estancias notables como el Salón de las Asambleas Generales, decorado con impresionantes frescos y estucos, la Biblioteca o el Patio de las Naciones.

11. Iglesia de San Francisco

La iglesia de San Francisco, situada cerca del Palacio de la Bolsa, forma parte del complejo mayor de San Francisco, que incluye también el Museo de Arte Sacro y Arqueología. Construida en el siglo XIV sobre los restos de una iglesia más antigua, la Iglesia de San Francisco. Aunque su estructura exterior conserva la sobriedad gótica, en el interior las capillas, columnas y techos están ricamente adornados con talla dorada en estilo barroco.

Uno de los aspectos más notables de la Iglesia de San Francisco es su catacumba, que proporciona una visión única de las prácticas funerarias de la época y alberga un museo que expone artefactos religiosos y restos arqueológicos.

¿Qué ver en Oporto en tres días? Día 2

El segundo día puede enfocarse en la ribera del Duero, incluyendo el Puente de Don Luis I, un paseo por el Cais da Ribeira y una visita a alguna de las prestigiosas bodegas de Vila Nova de Gaia, donde se puede aprender sobre la producción del vino de Oporto y disfrutar de catas.

12. Muralla Fernandinha

La Muralla Fernandinha originalmente rodeaba gran parte del casco antiguo de la ciudad. Construida durante el reinado de Fernando I en el siglo XIV, esta muralla fue diseñada para proteger la ciudad de invasiones y ataques, reemplazando y ampliando las defensas anteriores que datan de tiempos romanos y medievales. A lo largo de los siglos, la Muralla Fernandinha ha sido testigo del crecimiento y los cambios de Oporto, convirtiéndose en un símbolo de la resistencia y evolución de la ciudad. Hoy en día, los restos de esta histórica fortificación pueden encontrarse aun dispersos en diferentes partes de Oporto.

Uno de los puntos destacados para ver los vestigios de la muralla es en la zona alrededor de la Catedral de Oporto (Sé do Porto), de camino al puente de Don Luis I, donde los muros aún se conservan bien y nos permite apreciar la magnitud de las antiguas defensas de la ciudad. Otro tramo notable se encuentra cerca de la Puerta de Carvão (Porta do Carvão), en el Cais de Ribeira, que era una de las entradas a la ciudad medieval.

Muralla Fernandinha, Oporto

13. Puente de Don Luis I

El Puente de Don Luis I es una de los lugares más icónicos de Oporto. Inaugurado en 1886, este puente de dos niveles, diseñado por el ingeniero Théophile Seyrig, discípulo de Gustave Eiffel, es una maravilla de la ingeniería del siglo XIX y uno de los mejores ejemplos de la arquitectura de hierro.

No solo es uno de los lugares más interesantes que ver en Oporto, sino que también cumple una función práctica ya que une la ciudad de Oporto con Vila Nova de Gaia. La parte superior del puente ofrece un paseo peatonal y una vía para el metro, proporcionando además unas vistas panorámicas inigualables del río Duero. Desde el puente, se puede admirar el paisaje urbano de Oporto, con sus edificios históricos. La parte inferior, destinada a vehículos y peatones, nos da una perspectiva más cercana al nivel del río, permitiendo apreciar la magnificencia arquitectónica del puente desde una vista diferente.

14. Mirador Serra do Pilar

El Mirador Serra do Pilar, situado en la orilla opuesta del río Duero, junto al histórico monasterio del mismo nombre, ofrece una de las vistas más impresionantes y fotogénicas de Oporto. Desde esta privilegiada posición elevada, se puede disfrutar de una panorámica completa que abarca el icónico Puente de Don Luis I, extendiéndose hasta el casco antiguo de Oporto, donde las casas de variados colores parecen descender en cascada hasta encontrarse con el río.

Las vistas al atardecer son también muy bonitas por lo que vale la pena acercarse a este rincón a última hora del día.

15. Vila Nova de Gaia

Al cruzar el Puente de Don Luis I desde Oporto hacia Vila Nova de Gaia, te encuentras con una de las zonas más emblemáticas de Portugal, conocida principalmente por albergar las famosas bodegas de vino de Oporto. Vila Nova de Gaia se sitúa en la margen sur del río Duero y ofrece una perspectiva única de Oporto, con vistas impresionantes de la ribera y del casco antiguo de la ciudad.

A lo largo de la orilla, se encuentran varias de las bodegas más antiguas de Oporto que han envejecido el famoso vino que lleva el nombre de la región. Una visita a Gaia no está completa sin explorar algunas de estas bodegas, donde se puede aprender sobre el proceso de producción del vino de Oporto, y por supuesto, disfrutar de catas que muestran la riqueza y variedad de este vino mundialmente apreciado.

Además de las bodegas, Vila Nova de Gaia ofrece hermosos paseos a lo largo del río, terrazas con vistas panorámicas y excelentes restaurantes donde se puede degustar la gastronomía local acompañada, indudablemente, de un vaso de vino de Oporto. También es el punto de partida de muchos cruceros por el Duero.

16. Visitar una bodega

Visitar una bodega en Vila Nova de Gaia es sumergirse en el corazón de la tradición vinícola de Oporto, una experiencia turística imprescindible para los amantes del vino. Nosotros optamos por la Bodega Ferreira, un establecimiento con una rica historia y reputación en la elaboración del vino de Oporto. Aunque no es la más antigua, Ferreira destaca por su calidad y la pasión que dedica a la producción de vinos, convirtiéndola en una parada obligatoria para quienes desean comprender la esencia del famoso vino de denominación de origen.

17. Jardim do Morro

El Jardim do Morro, situado en Vila Nova de Gaia, es un encantador parque que ofrece una de las mejores vistas panorámicas de la ciudad de Oporto y del emblemático Puente de Don Luis I. Con fácil acceso a través del teleférico de Gaia o caminando por el Puente de Don Luis I. Este espacio verde, ubicado en la cima de una colina, es un lugar predilecto tanto para locales como para turistas y una buena alternativa al vecino mirador de Serra do Pilar. Además de sus impresionantes vistas, el Jardim do Morro ofrece áreas verdes bien cuidadas, senderos para pasear y bancos donde simplemente sentarse y contemplar el paisaje.

18. Cais de Ribeira

Para acabar el día, una buena opción es acercarse al Cais da Ribeira, uno de los lugares más emblemáticos y pintorescos de Oporto, situado a orillas del río Duero. Este vibrante paseo marítimo está lleno de coloridas casas antiguas, restaurantes, bares y cafés, ofreciendo una atmósfera única que encapsula el alma de la ciudad. Desde aquí, se pueden disfrutar de vistas espectaculares del Puente de Luis I y de las bodegas de vino de Oporto que se encuentran en la orilla opuesta del río, en Vila Nova de Gaia.

El Cais da Ribeira no es solo un lugar para pasear y disfrutar de las vistas; es también el corazón latente de la vida social de Oporto. Durante el día, turistas y locales se mezclan en sus estrechas calles empedradas, explorando las tiendas de recuerdos o degustando platos típicos en alguno de sus muchos establecimientos.

Cais de Ribeira

¿Qué ver en Oporto en tres días? Día 3

Para el tercer día, se recomienda explorar áreas menos transitadas pero igualmente encantadoras como las playas situadas en la desembocadura del Duero,  subirse a la línea 1 del tranvía o disfrutar de vistas panorámicas desde el jardín del Palacio de Cristal. Una parada en el Mercado do Bolhão permite a los visitantes experimentar la vida local y probar productos frescos y tradicionales.

19. Iglesia de San Ildefonso

La Iglesia de San Ildefonso se encuentra cerca de la animada calle Santa Catarina. Levantada en el siglo XVIII, esta iglesia barroca se distingue por los más de 11,000 azulejos azules y blancos que decoran su fachada, obra del artista Jorge Colaço, que narran escenas de la vida de San Ildefonso y de la Virgen María. Al entrar, nos sorprenden destacan los altares dorados y las pinturas que adornan sus paredes y techos, ofreciendo un ejemplo magnífico del barroco portugués.

Desde su posición elevada, podemos observar la Torre de los Clérigos.

Iglesia de San Ildefonso, Oporto

20. Rua de Santa Catarina

La Rua de Santa Catarina es una de las calles más concurridas y animadas de Oporto, conocida por ser el principal destino de compras de la ciudad. Esta larga avenida peatonal está repleta de tiendas, desde marcas internacionales hasta boutiques locales y cafeterías tradicionales. La Rua de Santa Catarina alberga algunas joyas arquitectónicas y culturales, como el Café Majestic. Este histórico café, fundado en la década de 1920, es un magnífico ejemplo del arte nouveau en Oporto.

Café Majestic, Oporto

21. Capela das Almas

Situada en la misma Rua de Santa Catarina, la Capilla de las Almas (Capela das Almas) destaca por su fachada decorada con miles de azulejos azules y blancos que narran escenas de la vida de San Francisco de Asís y Santa Catalina. Esta obra maestra del azulejo, diseñada por Eduardo Leite, es uno de los ejemplos más notables de azulejería portuguesa en Oporto.

 

 

22. Mercado de Bolhao

El Mercado do Bolhao es un emblemático edificio que ha sido testigo de la vida cotidiana de la ciudad desde su inauguración en 1914. Este mercado se aloja en un edificio de dos pisos, caracterizado por su arquitectura neoclásica, donde destaca su gran claraboya central que inunda de luz natural los coloridos puestos del interior. Diseñado para ser un espacio funcional y estético, el edificio combina elementos de hierro forjado, amplios corredores y una serie de pequeñas tiendas y puestos que se distribuyen alrededor de un patio central, ofreciendo una atmósfera única y acogedora.

A lo largo de los años, el Mercado do Bolhão no solo ha servido como el principal punto de venta de productos frescos en Oporto, sino que también ha funcionado como un lugar de encuentro para los habitantes de la ciudad, manteniendo vivas las tradiciones y la cultura local.

23. Tranvia de Oporto

Una de las experiencias más recomendables en Oporto es tomar el tranvía de la Línea 1 que recorre el margen del río Duero desde el Infante (cerca del Palacio de la Bolsa) hasta Passeio Alegre en Foz do Douro. Es una experiencia única que te permite ver la ciudad desde una perspectiva diferente. Los tranvías aún mantienen ese aire retro y encantador.

Al llegar a Foz do Douro, el ambiente cambia completamente. El río se encuentra con el océano, la brisa marina, las playas, cafés y restaurantes, lo convierten en el lugar perfecto para pasar una tarde relajada con vistas al mar. Uno de los rincones más fotografiados es la Pérgola da Foz, construida en el siglo XX, desde donde se disfrutan de magníficas vistas del oceano.

24. Fuerte de Sao Francisco Javier

El Fuerte de Sao Francisco Xavier, comúnmente conocido como Castelo do Queijo debido a su ubicación sobre una formación rocosa que se asemeja a un queso, es una fortificación militar situada en la costa de Oporto, cerca de la desembocadura del río Duero. Este fuerte, construido en el siglo XVII, fue diseñado como parte de las defensas de la ciudad contra los ataques piratas y otras amenazas marítimas.

Fuerte de Sao Francisco Javier

25. Parque del Palacio do Cristal

El Parque del Palacio de Cristal está ubicado en una colina que ofrece vistas panorámicas del río Duero y del mar Atlántico. Este parque es uno de los lugares más encantadores y románticos de la ciudad. Fue diseñado en el siglo XIX para albergar el Palacio de Cristal, una estructura de hierro y cristal inspirada en el famoso Crystal Palace de Londres, el edificio original fue demolido en la década de 1950 para dar paso al Pabellón Rosa Mota, un espacio moderno que hoy acoge eventos deportivos y culturales.

Los jardines que rodeaban el palacio han sido cuidadosamente conservados. El parque está dividido en varios jardines temáticos, incluidos jardines formales con fuentes y estatuas, un jardín de rosas, y áreas boscosas. Uno de los puntos destacados del parque es el mirador, desde donde se pueden admirar las impresionantes vistas de la ciudad y el río, convirtiéndolo en el lugar perfecto para relajarse o para venir al atardecer.

¿Más días en Oporto?

Si cuentas con más días en esta ciudad portuguesa te recomendamos realizar una excursión de un día a alguno de estos lugares:

  • Guimaraes. Conocida como la cuna de Portugal, Guimaraes es una ciudad histórica que jugó un papel crucial en la formación de la nación portuguesa. Su centro medieval, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, está repleto de edificios históricos bien conservados, calles empedradas y plazas tradicionales. No te puedes perder el Castillo de Guimaraes y el Palacio de los Duques de Braganza, que ofrecen un vistazo a la vida noble portuguesa de la Edad Media y el Renacimiento.
  • Braga. A menudo denominada como el “Roma portuguesa” por su rica tradición religiosa, Braga es una de las ciudades más antiguas de Portugal y un importante centro religioso. La impresionante Catedral de Braga, la más antigua del país, y el Santuario de Bom Jesus do Monte, famoso por su escalinata barroca y vistas panorámicas, son dos de sus mayores atracciones. Braga combina su patrimonio histórico con una vibrante vida cultural y universitaria.
  • Aveiro. Aveiro es una ciudad encantadora conocida por sus “moliceiros”, barcos tradicionales que recorren estos canales. La arquitectura Art Nouveau, los azulejos coloridos y las salinas son solo algunas de las vistas que hacen de Aveiro un lugar especial para visitar. No olvides probar los “ovos moles”, un dulce típico local.

¿Qué comer en Oporto?

A continuación, os hablamos de algunos platos que no puedes dejar de probar durante tu visita a esta ciudad portuguesa:

  • Francesinha: Este sándwich es una institución en Oporto. Compuesto por diferentes tipos de carne entre dos rebanadas de pan, cubierto con queso derretido y bañado en una salsa picante y tomate, se sirve generalmente con patatas fritas. Es una comida contundente, perfecta para reponer energías después de un largo día visitando la ciudad.
  • Bacalhau à Brás: El bacalao es un pilar de la cocina portuguesa, y el Bacalhau à Brás es una de las formas más sabrosas de disfrutarlo. Este plato combina bacalao desmenuzado con cebolla, patatas fritas y huevo batido, todo cocinado junto y adornado con aceitunas negras y perejil. Para disfrutar de un buen bacalao puedes ir a cualquiera de los restaurantres de Vila Nova de Gaia.
  • Tripas à Moda do Porto: Este es uno de los platos más tradicionales de Oporto. Preparado con diferentes tipos de carne, tripas, judías blancas y una variedad de verduras y embutidos.
  • Caldo Verde: Una sopa simple hecha con col gallega cortada en tiras finas, patatas, cebolla y chorizo.
  • Pasteles de Nata: No se puede hablar de la gastronomía portuguesa sin mencionar los famosos pasteles de nata. Estas tartaletas de crema, con su relleno cremoso y su costra crujiente, son el acompañamiento perfecto para un café a cualquier hora del día.
  • Vino de Oporto: Por supuesto, ninguna visita a Oporto estaría completa sin degustar su famoso vino. Ya sea que prefieras el Tawny, Ruby, Blanco o Rosé, una visita a las bodegas de Vila Nova de Gaia es una excelente oportunidad para aprender sobre la producción de este vino y disfrutar de algunas catas.

Bacalao en Oporto

¿Cómo llegar del aeropuerto al centro de Oporto?

Del aeropuerto a Oporto ciudad la opción mas fácil, cómoda y económica es el metro. El metro tiene una parada en el propio aeropuerto por lo que cuando salgáis solo tenéis que seguir las indicaciones hasta la estación de metro. Allí podéis comprar los tickets en las maquinas. Cada pasajero debe tener una tarjeta, la cual podremos cargar con uno o varios viajes según necesitemos. No os confundáis y compréis solo una tarjeta con dos viajes.

Después de pasar tres días explorando Oporto, queda claro que esta ciudad tiene mucho que ofrecer. Desde las históricas bodegas de vino hasta las impresionantes vistas desde sus miradores, cada esquina de Oporto está llena de vida y historia. La ciudad nos invita a descubrir no solo sus monumentos, sino también a experimentar su vibrante cultura y la calidez de su gente.

Oporto es una ciudad para degustar, con una gastronomía rica y variada que refleja la esencia de Portugal. Es un lugar para sentir, desde el bullicio del Mercado do Bolhão hasta la tranquilidad del río Duero al atardecer. Y, sobre todo, es un lugar para vivir, ofreciendo una mezcla de tradición y modernidad que enamora a quien la visita.

Esperamos que este recorrido por Oporto te anime a explorarla por ti mismo y descubrir tus propios rincones favoritos en esta ciudad portuguesa.

Información práctica

Actividades en Oporto

Otros artículos sobre Portugal:

 

 

 

Deja un comentario